El proyecto Descanso Feliz tiene una inversión de 18.500 dólares por parte de la Prefectura y 5 mil dólares de Plan Internacional para el apoyo a los técnicos y capacitadores.
Juan Tobar, capacitador del proyecto, enfatizó la importancia de estos talleres, los mismos que están enfocados a que los niños, niñas y adolescentes comprendan la necesidad de cuidar sus cuerpos y entender esto como parte de un derecho a la sexualidad.
Resaltó que a través de la educación en sexualidad se ha detectado la falencia de este tipo de enseñanza en la familia por ello es necesario que cada una de las familias empiecen a conocer estos derechos y vivirlo junto a sus hijos.
Para Digna Toaquiza, adolescente participante del taller, este evento ha sido de gran importancia porque han aprendido como cuidar su cuerpo y a decir no a las personas que quieran regalarles algo a cambio de ir con ellos o dejarles topar sus cuerpos.
En cada uno de los talles participan alrededor de 60 estudiantes entre niños, niñas y adolescentes en una edad comprendida entre los 8 y 18 años; durante las próximas semanas se realizará las capacitaciones en el resto de parroquias seleccionadas.